







Jose María Mellado - Landscape, the eternal return from Mauro Fuentes on Vimeo.
Despues de nuestra estancia en Bohol, tomamos un vuelo con destino Puerto Princesa. Curiosamente en la web de Cebu Pacific Air no había disponibilidad de billetes, sin embargo, mediante una oficina de turismo de Alona Beach, nos salieron por 2500PHP.
Despues de llegar a Puerto Princesa, realmente no eramos conscientes de lo que nos esperaba. Fuimos a la estación de autobuses y resulta que ya no había ningun bus para el Nido o Port Barton. "No problem", nos dijo un chofer. Por 9000 PHP nos llevaban en un minibus a los 4. Desechamos el prolongar nuestra estancia en Puerto Princesa y partimos hacia el norte.
Nos esperaban unas 12 horas por una tortuosa pista de barro. El asfalto dejó de existir una vez haber salido de la ciudad. Primero paramos en Port Barton, pero visto que no había NADA ni NADIE, parecía un pueblo abandonado, seguimos hacia el Nido. "no problem" dijo el chofer. Durante el trayecto la furgoneta no dejó de dar tumbos, pinchamos 2 veces, tuvimos que salir y empujar un par de veces. La noche se nos hecho encima...y eso que salimos al medio día de Puerto Princesa.
Tal era la deseperación que creció en nosotros que a la altura de Roxas, nos abastecimos de una botella de ron Tanduay, "si tenemos que morir, que sea borrachos" llegó a salir de nuestras bocas.
El tiempo se detuvo hace tiempo en las pequeñas aldeas de Palawan
La noche se nos hecho encima...oimos la voz de la selva espesa que aguardaba al otro lado de la ventanilla. En un momento dado, no se si por la desesperación o por el ron, perdí la noción de tiempo y lugar. Creíamos que nunca llegaríamos. Incluso me dormí, aunque luego me preguntase cómo lo hice. Al despestar cogi la botella de ron..."finito, lastima!". Por lo menos en este punto me di cuenta del porqué del alto precio de la furgoneta para El Nido.
Finalmente llegamos a el Nido a eso de las 2 de la mañana. Por supuesto, no teniamos hecha ninguna reserva. "llevamos al mejor sitio, esto hay que celebralo" le dijimos al chofer. Nos alojamos en el Nido Beach Resort. Enfrente la playa. 2000PHP ."que más da". No eramos personas. Además y debido a la cerrada noche todavía no nos habiamos hecho a la idea de cómo era el pueblo. "como no sea el eden, vamos a matar a la gente que nos recomendó este sitio". El viaje nos había molido. Al día siguiente al despertar, esto es lo que vieron nuestros ojos...
La bahía del Nido
El Nido y Bacuit se asemeja a Halong en Vietnan y Phanga Nga en Tailandía. Lo que pasa es que uno tiene la extraña y por tanto la excitante sensación de estar en lugar perdido, aislado del mundo, lo que hace que lo hace más especial. Es un verdadero paraíso. Tranquilidad. Palawan tiene dos velocidades:Lenta y super lenta. Formaciones carsticas que trepan desde el mar, atardeceres que te llegan al alma mientas los niños juegan en la playa con lo primero que encuentran. Olor a pescado a la parrila. San Miguel en la playa. Vamos...que Leonardo di Caprio no vino aquí por que estaba muy lejos.
Fué tal el placer que surgió de mi ser que estas son las palabras que escribí en mi blog de viaje:
" A las noches me acuesto con el armonioso sonido de las olas de Bacuit. A las mañanas estiro los pies sintiedo la arena de estas latitudes. Intento abrir mis 5 sentidos y retener estas sensaciones. Recuerda:Los recuerdos se escurren en el tiempo.Por eso quizas el tiempo lo cura todo. Intento saborear cada atardecer, cada sonrisa complice, cada brisa con sabor a coco, cada San Miguel, cada mirada que me brinda un niño a su vuelta del cole, cada color del cielo como si fuese el último. Lo que se graba con el corazón es para siempre me digo, por eso sé, que cuando me vaya de aquí, parte de esto estará conmigo, y parte de mi permancerá aquí"
"cada uno es libre de hacer lo que quiera con su dinero. Gastarlos en un viaje a veces es una decisión extraña, dura y sobre todo de alto riesgo. Nunca se puede saber que es lo que nos deparará.No obstante, un viaje nos es como un coche o como un reloj. Ya no hay vuelta atrás. Un viaje es para toda la vida. Es algo que nadie te lo va quitar, y algo del cual raramente te lamentarás. En un viaje a tierras remotas, conoces al verdadero YO. Ya no eres tú y tus amigos; tú y tus conocidos; tu y tus prejuicios;tú y tus temores y preocupaciones. En un viaje estas más cerca de tu verdadero tú. Si quieres conocerte más:Viaja!"
De Tagbilaran tomamos un taxi a Alona Beach, supuesto epicentro turistico de la zona. Ah! En Tagbilaran paramos para cambiar moneda, que disponen de un cambio más ventajoso que los hoteles de Panglao.
La verdad es que es fuerte decir que nuestra estancia en Bohol fuese un paso atrás`. No sé si fué por el desagradable tiempo que tuvimos, por que fuera un lugar infestado de Coreanos y Chinos, por que me pareciese un Benidorm Filipino ( con perdón a ambos), o que veniamos previamente de un sitio realmente paraisíaco, pero el hecho es que no me gustó mucho Bohol, y más concretamente Panglao. Me pareció un lugar un tanto prostituido, excesivamente maquillado,un lugar ya hecho excesivamente al turista. Soy consciente de que mis afirmaciones son 100% personales, pero ese es el sabor de boca que me dejó...aun así me lo pasé genial, y mi recuerdo se ha ido endulzando con la distancia temporal.
Os recomiendo que hecheis un vistazo a las habitaciones de los resorts u hoteles antes de tomar la decisión de alojaros. En más de una nos llevamos una no precisamente agradable sorpresa. No os dejeis engañar por el hall o por las piscinas de los hoteles.